La mejor conservada de todas las murallas de la ciudad de Barcelona, y un poco más retirada que otros restos del centro de la ciudad. Una forma fácil de acceder es llegar al final de las Ramblas (Monumento de Colón) y tomar la calle de la derecha detras del edificio del museo de les Drassanes. Nos encontraremos con el último y tercer tramo de muralla, incorporada según crecía la ciudad, perteneciente al siglo XIV fue reconstruida en el siglo XVIII. Este último tramo que llegado un momento de crecimiento de la ciudad intramuros, acabo ahogando la ciudad provocando que las condiciones de higiene, salud y esperanza de vida fuesen pésimas, por ello en el siglo XIX se destruyó definitivamente, así Barcelona creció y se extendió tal y como la conocemos hoy en día. La óptima conservación arquitectónica confiere un aspecto realmente agradable a este tramo amurallado, es aquí donde se puede ver la única puerta de entrada medieval, el portal de Santa Madrona construido a partir de 1378. Tras veinte años de trabajos de restauración y coincidiendo con las fiestas de la patrona este portal volvió a abrir sus puertas a los ciudanos el 10 de Marzo de 2013.
Fotografías: Andres Mauri
Carrer del Portal de Santa Madrona
08001 Barcelona.
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